“Ayúdame a hacerlo por mí mismo." — María Montessori✨
Seguro que lo has escuchado mil veces: “¡Yo solo!” 🙋 es uno de los reclamos míticos de la ;infancia, junto con la de “¡Es mío!” 🧸 o “¡Mamá!”.❤️
Ese momento en que tu hijo o hija va a vestirse, a ponerse los zapatos, decide que va a comer sin ayuda ;🍴 o que va a servirse el agua por sí misma, porque sabe (cree) que puede.
Es el inicio de su autonomía personal infantil, y el inicio de esa época en la que piensas “Señor, llévame” 😅 o un poco menos fatídico: “Señor, que esta época pase pronto”🙏”. Y es ;que, si le dejas hacerlo, estarás cultivando su autonomía y tu paciencia, pero a la vez, notarás cómo la semilla de la ansiedad que vive en tu pecho brota por momentos.

Si alguna vez te has sentido entre la ternura y la impaciencia mirando cómo tu pequeño lucha por subirse el calcetín, por llamar al botón del ascensor cuando está claro que no llega, o lo ves comer cogiendo la comida con una mano, para ponerla en la cuchara, llevársela a la boca, y ver cómo se le cae de nuevo, este post es para ti 🤔.
¿Qué es la autonomía infantil y por qué es importante?
La autonomía infantil es esa capacidad que los peques van desarrollando poco a poco para hacer cosas por sí mismos, tomar decisiones, aprender de sus errores ❌➡️✅y cuidar de sí en la medida que corresponde a su edad. Puede ir desde elegir la ropa que quieren ponerse (botas de lluvia un día de sol a 34 grados, o un pantalón corto una mañana de fría tormenta) 👗🩳, hasta intentar comer con la cuchara 🥄.
Y pueden parecer cosas banales, pero en realidad va mucho más allá, porque tiene que ver con la capacidad de sentirse capaz y seguro participando de las decisiones que atañen directamente a su vida y su bienestar.
Así, no es algo tan simple como “dejar que hagan”, sino un hacerle saber y sentir que confiamos en ellos. 🤝 Porque cuando un niño siente que puede, que confiamos en él porque es competente, surge la magia. Aprenden a resolver, a equivocarse sin miedo y a pedir ayuda cuando la necesitan. En resumen, se construye su autonomía personal infantil y se cultiva el desarrollo global, porque les estamos diciendo: confío en ti, sé que puedes, y estoy aquí si me necesitas.
El momento “¡Yo solo!”: necesidades detrás de la independencia
Cuando tu peque te sorprende un buen día (habitualmente hacia los 2 años), con la frase: “¡Yo solo!”, te está haciendo una gran declaración de independencia. Detrás de ella no hay rebeldía ni capricho, no te está retando; es una necesidad vital: explorar el mundo desde la propia experiencia 🔬.
Quieren ponerse solos sus Feroces 👟, aunque se los acaben poniendo al revés. Quieren comerse solos el yogur, aunque la mitad acabe repartida entre su camiseta y la mesa. Quieren subirse solos al coche 🚗y ponerse ellos su arnés (aquí iría bien esta respuesta: “Entiendo que quieras hacerlo solo. Hazlo, y luego yo te lo acabo de poner bien” —la seguridad no se negocia—).
Como hablamos el otro día, tienen que intentarlo, que equivocarse y frustrarse si no lo logran. Tienen que buscar nuevas soluciones, llevar a cabo nuevos intentos, y volver a equivocarse. Hasta que por fin lo consiguen y se sienten la mar de orgullosos 🥳.
"Los niños deberían poder hacer sus propios experimentos e investigaciones. Los adultos podemos guiarles ofreciendo materiales adecuados, pero lo esencial es que, para que un niño entienda algo, debe construirlo por sí mismo." — Jean Piaget
Y todo eso es un maravilloso proceso de aprendizaje que debemos acompañar con paciencia, con cariño y con humor 🥰. Sí, también con humor. Porque cuando diga que ya se ha vestido y veas que parece un cuadro de Picasso, te vas a reír (pero por favor, que no te vea hacerlo, que no sienta que te ríes ni de su esfuerzo, ni de su resultado). Ríete por dentro, hazle una foto que se convertirá en anécdota y tómatelo así, pues si no, correrás el riesgo de acabar claudicando 😂.
Cómo fomentar la autonomía infantil sin frustrarse
La autonomía no se enseña, se acompaña. Aquí van algunas claves:
- 👕 Ofrecer opciones sencillas: Que tengan ropa cómoda que puedan ponerse y quitarse. Zapatos fáciles de poner. Aquí la filosofía del calzado respetuoso de Zapato Feroz tiene mucho sentido: son zapatos cerrados que se diseñan para que los peques puedan calzarse solos, cultivando confianza y autonomía. Asimismo, poner a su alcance sus vasos y cubiertos, el agua que quiera servirse, servilletas… e incluso un trapito para limpiar las migas de la mesa.
- 📅 Crea rutinas visuales: A través de fotos, dibujos o mediante tablas de rutinas, puedes organizar los días para que sepan qué hacer, y cuándo, sin depender de los adultos.
- ⏳ Ofrecer tiempo: La prisa es enemiga de la autonomía. Si necesitan cinco minutos más para ponerse el abrigo, que los tengan. Si un día no los tenéis, mano izquierda y validar sentimientos: “Cariño, sé que quieres ponerte la chaqueta solito. Y me encanta. Sin embargo, llegamos tarde. Hoy te la voy a atar yo, pero intentaremos salir con más tiempo para que todos los días lo puedas hacer tú”. ¿Llorará y se quejará aunque le digas esto? Sí, es muy probable. Pero al menos os podréis ir rápido, llegar a tiempo, y no le habrás faltado al respeto.
- 🧼 Aceptar el desorden: Aprender implica mancharse, equivocarse y volver a probar. Es parte del proceso, y así debemos entenderlo. Vives con un cachorro humano. Sería preocupante que no manchara…
- 🤗 Pedir ayuda cuando haga falta: Autonomía no significa hacerlo todo solos siempre. También es aprender a decir “no puedo, ¿me ayudas?”. Y acudir con ; cariño, y paciencia, para echar una mano como guía.
Y algo fundamental: no corrijas de inmediato. Acompañar no es ni dejar solos, ni hacer por ellos. Es estar presentes, disponibles, observando e interviniendo cuando te pide ayuda o de verdad sientes que la necesita.
Beneficios de la autonomía infantil
Cuando acompañamos el desarrollo de la autonomía infantil sin presionar, los beneficios se multiplican:
- 💪 Mayor autoestima y confianza en sí mismos.
- 🎯 Mejor desarrollo de la motricidad fina y gruesa.
- 🧠 Mayor capacidad de decisión, de resolución de conflictos y mayor paciencia, que es una maravillosa preparación para la vida.
- 🤯 Mejor relación con el error.
- ❤️ Vínculos más respetuosos y empáticos en casa.

Conclusión: a
compañar la autonomía con paciencia y respeto
El “¡Yo solo!” puede ser un desafío para las familias, pero es, sobre todo, un regalo 🎁. Es la forma que tienen los niños de mostrarnos que están creciendo, que se sienten capaces y que quieren probar. Nuestro papel es estar a su lado para acompañar con paciencia, empatía y confianza 👨👩👧👦.
"No hagas por un niño nada que él sea capaz de hacer por sí mismo." — Rudolf Dreikurs
Así, la autonomía no se convierte en una batalla, sino en una oportunidad de crecer juntos. Porque no hay nada más bonito que ver cómo nuestros peques descubren de lo que son capaces, mientras saben que siempre estaremos ahí para atenderlos si tropiezan 💪.